Cada año que pasa, hacemos balance de los doce meses que se van y reflexionamos sobre el rumbo que queremos tomar en los doce siguientes. Antes, es natural darnos un respiro comiendo turrón y cenando con la familia en las fechas más señaladas de diciembre y enero. Después, sabemos que ha llegado el turno de reinventarnos, de mejorar, de continuar avanzando, de eliminar esos aspectos de nosotros mismos que no nos convencen y potenciar aquellos de los que estamos orgullosos. El año nuevo, en definitiva, siempre es una época de pensar en cambios y de afrontar aquellos que vendrán.
Pero este rumbo circular no se aprecia solo en la vida personal de cada individuo, sino también en numerosos ámbitos colectivos. Las nuevas tendencias en moda, en electrónica, en arte y, por supuesto, en Google. Porque este 2018, Google no se ha olvidado de renovar sus algoritmos de búsqueda. Las personas que no se dedican activamente al marketing digital no tienen por qué saber qué es un algoritmo y para qué sirve, de modo que digamos que nos referimos a las palabras clave que los programadores introducen en sus buscadores para posicionar páginas web de toda clase.
Este año, por ejemplo, Google decidió que emplearía la versión móvil del buscador como modelo de referencia estándar para el posicionamiento web. Por otro lado, este año todavía no veremos un adelanto significativo en las búsquedas por voz, pues al gigante empresarial le interesa mejorar el servicio del buscador por teclado. En general, el perfeccionamiento que busca Google se enfoca a que el usuario no tenga la necesidad de abandonar la página en el buscador para consultar un resultado; es decir, que no sea obligatorio entrar en otra web para obtener la información deseada.
Quizá, a priori, esto parezca una facilidad poco útil si el usuario desea entrar en ciertas páginas y ampliar información. Sin embargo, no necesitamos entrar en una web distinta a la de Google para saber cuál es la temperatura en nuestra ciudad a día de hoy, por ejemplo. En resumen, Google busca pragmatismo y un sistema cada vez más intuitivo.