Cada vez son más las empresas que necesitan contratar a un diseñador gráfico. Evidentemente, cualquier nueva marca o nuevo negocio que necesite darse a conocer, necesita para ello una imagen, un nombre, un logo, un eslogan. De eso se encargan los expertos en marketing digital, una nueva y cada vez más potente rama de la publicidad, pues internet está empezando a ser la plataforma por excelencia para crear y desarrollar nuevos negocios. Por esa razón, cada vez es más necesaria la figura del diseñador gráfico. Pero no solo la suya, también la del diseñador web. Porque la web es el nuevo local físico.
Ese es el motivo por el cual el diseño web se ha convertido en una herramienta de marketing fundamental. Más bien, imagen y web tienen que estar sincronizadas, fusionadas. Deben representar lo mismo, ser lo mismo. Así, y obedeciendo también a las necesidades de inmediatez de los tiempos actuales, un sentimiento generado por la rapidez de comunicación e información de la red, han surgido muchos diseños acordes en 2018. Por ejemplo, el minimalismo, la limpieza o las figuras geométricas, que confieren un aspecto visual con el que es muy fácil interactuar.
Por otra parte, no debemos olvidar que vivimos en la era de lo dispositivos electrónicos portátiles, como el eBook, la tablet o, por supuesto, el teléfono móvil. Todos ellos, aparatos que facilitan la navegación digital y el entorno virtual. Por esa razón, es lógico que proliferen los diseños de pantallas divididas en vertical; los cuales, además de elegantes, presentan mucha información en muy poco espacio, lo que resulta muy adaptable a pantallas que sean más pequeñas que las de un ordenador.
Aun así, en unos tiempos tan simples y funcionales como los de la actualidad, queda espacio para lo tradicional. Las tipografías handmade tienen mucho éxito por eso y porque son muy sencillas. En la era de la informática, en ocasiones necesitamos ensalzar los usos y costumbres de toda una vida, como escribir sin un teclado de por medio. Está por ver, en cualquier caso, cuáles serán las preferencias web dentro de diez o veinte años.