El siglo XXI se caracteriza por el nacimiento de internet, que nos ha facilitado maneras directas e inmediato de comunicarnos con personas y presenciar eventos que ocurren a miles de kilómetros de distancia de donde estamos. Dicho así, y especialmente cuando hablamos de «la era de internet», tendemos a creer que estas facilidades han sido siempre las mismas desde que esta herramienta se empezó a instalar en los ordenadores personales de todo el mundo a finales de los años noventa. Sin embargo, nada más lejos de la realidad. De hecho, si comparamos los diseños de las páginas web de hace casi veinte años con los diseños actuales, nos daremos cuenta de cuán rudimentarios eran los antiguos y de cómo nosotros mismos no somos conscientes hasta realizar la comparativa. Al fin y al cabo, el cambio ha sido progresivo y gradual.
Si tenemos que establecer diferencias entre las páginas web de la era infantil de internet y las de la era actual, encontramos que las actuales son, con diferencia, mucho más interactivas. Las primeras páginas web nos ofrecían normalmente un mosaico de texto y de imágenes que nosotros solo podíamos ver y contemplar, y la única posibilidad de interacción era la de hacer click en los distintos enlaces. Hoy en día, sin embargo, tenemos la posibilidad de ampliar y disminuir los contenidos visuales, reproducir vídeos de manera automática, y navegar por el website a través de una pantalla táctil.
Esto, en parte, se debe al nacimiento de las televisiones en streaming, como Netflix, Amazon o HBO, pues la filosofía de su diseño se basa en dejar al cliente hacer y ver lo que quiera y cuando quiera. Sin embargo, la variedad de dispositivos portátiles mediante los cuales podemos conectarnos también tiene mucho que ver. Actualmente, cada vez son más las páginas que se acogen al movimiento movil friendly, o, dicho de otro modo, a la adaptación d sus sitios web a la pantalla del móvil, mucho más intuitiva, dinámica y veloz de lo que puede ser el teclado de un ordenador. El diseño web evoluciona hacia el control absoluto del usuario.